Hoy en día, cuando la afición por las series han resurgido y los guionistas viven su siglo de oro, deberíamos adaptar la frase del director Quentin Tarantino “El éxito de una buena película reside en que después de verla quieras vestir como uno de sus personaje” ya que la influencia de estas ha tomado un peso nunca imaginado.
Hay series de moda y otras que crean moda. Algunas han pasando de ser seguidoras de tendencias a convertirse en referentes. Series como Sexo en Nueva York dejaron de fijarse en las colecciones y empezaron a crear un estilo propio convirtiéndose en punto de referencia e inspiración para los propios diseñadores. Ejemplo de esto son las confecciones de varios diseñadores para este otoño, como Peter Som o Michael Kors, que han devuelto a la pasarela esa elegancia y feminidad de los años 60 dejándose influir por una de las series de moda Mad Men.
Ahora el flujo de influencias no va de la realidad a la ficción sino de la ficción a la realidad, provocando que la calle tome como propias las tendencias escogidas por la pequeña pantalla que se ha convertido en un gran escaparate de glamour. Desde luego no podemos hablar de lo que marca tendencia sin tener en cuenta a la exitosa serie Gossip Girl, digna heredera del trono de Sexo en Nueva York y responsable de que la cadena Warner Bros haya firmado para crear una linea de ropa inspirada en sus personajes con la cadena británica Miss Selfridge. “La moda es intrínseca a Gossip Girl y un ingrediente clave en la popularidad de la serie” afirmo Paul Bufton, director general de productos de consumo de Warner Bros.
Pero España no se quedas atrás, a nuestro país también llegan estas tendencias, de hecho, la marca Stradivarius ha creado una linea de sudaderas inspirada en la serie. Pero tampoco dejamos de lado la cosecha propia, de ahí la existencia de la página web 'El armario de la tele' donde la ropa de las producciones televisivas española como Física o Química, El Intermedio o Fama también encuentran cabida.
Tal vez lo importante del tema es porqué ocurre esto, porque dejamos que una pequeña pantalla dicte lo que vamos a comprar mañana en las tiendas, qué es lo que provoca que la ficción traspase los limites de la pantalla y se apodere de nuestros deseos dejando de ser una simple trama. Los guionistas de hoy procuran crear en cada personaje un lifestyle diferente con el que puedan identificarse cada uno de los espectadores a través de la afinidad emocional o porque representen patrones deseados, aspiraciones. Esto nos traslada a un mundo de ilusión y sueño, ya que no es nuestra realidad pero si nos gustaría que lo fuese, y provoca en nosotros el deseo de parecernos a ellos, el deseo de que la sociedad nos acepte, por tanto le gente se ve en la necesidad de imitarles de intentar adaptar lo que ve a su vida real. Introduciéndose así nuevos hábitos, patrones culturales y tendencias de moda en la sociedad.
Aunque todo esto puede resultar irónico ya que es este acercamiento de las tendencias a las manos de todos es lo que provoca la muerte de la propia tendencia, pues es entonces cuando este carácter de individualidad, de distinción e identificación personal se convierte en un mero uniforme. Afortunadamente la creación es tal que podría decirse que en cuanto muere una nace otra dispuesta a viajar por el mundo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario